San Valentín, amor y consumismo
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Despegado casi por completo de su origen histórico, el 14 de febrero se ha convertido en el último siglo en un día perfecto para demostrar nuestro amor… a través de gestos materialistas y regalos. Y es que si San Valentín está relacionado con el amor es por un poema de Chaucer, llamado Parlamento de los pájaros, en el que por primera vez se hace mención de la unión que surgió siglos antes entre ese día tan señalado y los propios enamorados. De hecho, antes de existir San Valentín, a principios del primer milenio, se celebrara en todo el Imperio Romano una fiesta que poco tenía que ver con el amor, Lupercalia, una celebración en la que las mujeres que querían ser fértiles eran azotadas con látigos de piel de cabra, con sangre de ese mismo animal.
Aquella salvajada desapareció siglos después, quedando el día totalmente destinado a San Valentín, cuya leyenda cuenta que era un sacerdote cristiano que se dedicó, en tiempos de guerra, a casar en secreto a los soldados enamorados con sus amantes, justo antes de ir a la batalla, algo que el Imperio prohibía. Ese supuesto gesto hacia el amor le convirtió en el santo favorito de los enamorados, y el poema de Chaucer ayudó a expandir su leyenda desde el siglo XIV hasta nuestros días. La idea del amor romántico, eso sí, ha cambiado mucho en todo este tiempo, pero aquí estamos, ya bien entrados en el siglo XXI y todavía con ese día marcado en el calendario, sobre todo si tenemos pareja, ya que es un día de grandes celebraciones.
Tiendas en San Valentín
Se podría pensar que son los enamorados los que más disfrutan de esta festividad, y sin embargo, seguro que las tiendas especializadas en regalos románticos lo pasan mucho mejor en San Valentín. Porque al final son las que siempre salen ganando y haciendo su agosto durante todo el mes de enero y principios de febrero, una temporada que usualmente no es nada sencilla para las compras, ya que llega justo después de la navidad. Es la excusa perfecta para vender joyas, grandes regalos como viajes y experiencias románticas o al menos alguna que otra caja de bombones y ramos de flores. De hecho, desde mediados de enero son muchas las tiendas que ya están publicitando el tan ansiado San Valentín, con la colaboración de la propia sociedad, que nos empuja a hacer regalos en ese día tan señalado… aunque lo que importa, curiosamente, es el amor.
Cuánto se gasta la gente en San Valentín
De la misma manera que no se puede saber con exactitud lo que cada cual se gasta en sus vacaciones o en las compras navideñas, hacer un cálculo con San Valentín tampoco es sencillo. Hemos de tener en cuenta que esta festividad no es “celebrada” por todos, ya que hay mucha gente sin pareja que evidentemente, no tiene el más mínimo interés en San Valentín, y también hay muchas parejas, cada vez más de hecho, que no se toman este día como algo especial más allá de salir a cenar, como mucho, y deciden, por el bien de sus respectivos bolsillos, no gastar mucho dinero en lo que a regalos se refiere. Sin embargo, las compras de San Valentín siguen permitiendo que las tiendas tengan un respiro en este periodo tan complicado del año.
Podríamos calcular que de media, las parejas suelen gastarse 100 euros cada uno en los regalos de San Valentín, o en la propia cena de ese día, algo también muy habitual. Esa cantidad es muy relativa, por supuesto, y es que puede cambiar muchísimo dependiendo de la situación económica de la pareja y de mil detalles más. Por ejemplo, algunos deciden compartir el regalo y marcharse a una escapada romántica que pagarán a medias, mientras que otros prefieren sorprender a sus parejas con joyas y regalos mucho más caros que esos 100 euros. Lo importante, en realidad, no debería ser lo que nos gastamos, sino la intención de demostrar con nuestro amor que esa persona es con la que queremos estar, más allá de los regalos materialistas.
Regalos de San Valentín
La gran variedad que hoy en día existe en cuanto a regalos para fechas señaladas permite que cada cual haya podido encontrar el regalo perfecto de San Valentín para su pareja. Desde viajes y experiencias románticas, como cenas, catas de vino o espectáculos de teatro musical hasta las típicas joyas y flores, hoy en día se pueden encontrar regalos para todos los gustos y también para todos los bolsillos, algo que es importante de cara a quedar lo mejor posible con nuestra pareja. En realidad, pocos piensan en crear regalos por su cuenta, de la nada, hechos por ellos mismos, que puede ser algo menos materialista, más barato y que llame más la atención de nuestra pareja, porque no es solo el regalo, sino todo el esfuerzo que hemos puesto en crearlo.
Cómo celebrar San Valentín sin Dinero
Eso nos llevaría a utilizar nuestro ingenio para poder celebrar una fecha tan destacada con algo que hemos hecho por nuestra cuenta, sin necesidad de gastarnos una fortuna… Por ejemplo, si a nuestra pareja le gustan los dulces, podemos probar a hacer su pastel favorito, como regalo de San Valentín. Y cuando decimos pastel también puede ser cualquier otra receta que le encante, porque al final va a ser verdad eso de que a uno se le gana por el estómago. Si no tenemos mucho dinero, el tema de comprar joyas y abalorios seguramente sea complicado, pero de la misma manera, los podemos crear por nuestra cuenta, sobre todo pulsares y collares hechos por nosotros mismos.
El dinero no puede ser una excusa, porque al fin y al cabo la fiesta no debería ir de regalos caros, sino de puro amor, y eso se puede demostrar con un montón de gestos especiales que nos harán disfrutar de una día maravilloso. También las experiencias pueden ser relativamente económicas, porque podemos llevar a nuestra pareja a un lugar especial, que todavía no conozca, pero que no esté lejos de donde vivimos. Si no nos llega para un hotel, tampoco será necesario, con un bonito viaje de ida y vuelta a ese sitio, un paseo por la naturaleza, un picnic en el parque más hermoso de la ciudad, también podemos demostrar todo ese amor que llevamos dentro, y que no necesitamos tener un día especial para sacarlo.